top of page

La herboristería de los neandertales

Homo neanderthalensis era una forma arcaica tardía de nuestra especie que apareció alrededor de 500.000 años atrás y que habría desaparecido en gran medida de Europa y Asia hace 40.000 años, aunque hay evidencia de que en la zona de Gibraltar habría sobrevivido hasta hace 25.000 años.

Los neandertales se establecieron en Medio Oriente, Europa y Asia e interactuaron con humanos modernos desde hace 80.000 años hasta su desaparición.

Vivían en una variedad de ambientes, desde las regiones más frías del norte Alemania y Siberia a las regiones más cálidas del Mediterráneo.

Con el tiempo, los cambios ambientales afectaron su acceso a los alimentos, pero se adaptaron claramente para sobrevivir.
En el camino, los neandertales desarrollaron herramientas complejas, enterraron a sus muertos intencionalmente, crearon arte rupestre, hicieron ornamentos y es probable que hayan usado símbolos y hablado un idioma.

Según los estudios de la últimas décadas, hoy ya no se discute que los neandertales tenían un conocimiento sofisticado de su entorno natural, y que fueron capaces de reconocer tanto el valor nutricional como el medicinal de ciertas plantas.

Pero el debate sobre el uso práctico y simbólico de este conocimiento aún está abierto en la comunidad científica.

Tal vez el caso más intrigante de los neandertales y el uso ritual que daban a las plantas sea el de una tumba descubierta en 1975 en Shanidar, Iraq, en la que se encontró a un individuo enterrado con varias plantas reconocidas por tener propiedades medicinales. Se identificaron como achillea, cardo, senecio, muscari, centaurea, malva y pino. La agrupación y disposición de los granos de polen indican que flores de estas especies se colocaron en la tumba cuando ya estaban abiertas y debajo del difunto, formando una cama, hace más de 50.000 años, entre fines de mayo y principios de julio.

A pesar de toda esta evidencia, algunos autores discuten que estas sean pruebas de un uso herbario ritual, pues, posteriormente se descubrió que pequeños roedores comunes en la zona podrían haber introducido suficientes cabezas de flores en la cueva.

Otro caso, que presenta casi un testimonio directo del uso medicinal de plantas por parte de los neandertales, es el de los esqueletos de 13 individuos encontrados en 1994 en El Sidron, España. Este hallazgo no termina de brindar material para sorprendernos con los resultados de nuevas y sofisticadas técnicas de estudio que se van aplicando.

El análisis del material genético en el sarro dental ha permitido saber que su dieta incluía setas, piñones y musgo entre toda una variedad de plantas; y que, además, algunas de esas plantas habían sido cocinadas para su consumo. Pero no se han encontrado pruebas de que comiesen carne.

Los científicos se han sorprendido, ya que a los neandertales se les considera predominantemente carnívoros, a tal punto que evidencia de consumo de hierbas en individuos hallados en otros lugares, como Bélgica, había sido propuesta como el resultado de haber comido presas que tenían esas hierbas en su tracto digestivo.

Ahora, los detractores de la herboristería "neandertalesa" se quedaron mudos...

El análisis genómico ha revelado, además, que uno de los hombres adultos de El Sidrón estaba enfermo y que había ingerido componentes de álamo, un árbol que contiene ácido salicílico (del que se obtiene la aspirina) y hongos del género Penicillium (que tienen actividad antibiótica); y que una de las mujeres había ingerido manzanilla y achilea, plantas de escaso valor nutricional pero con propiedades medicinales.

Casi no quedan dudas en cuanto a que los neandertales se trataban los trastornos estomacales y a que tenían un comprensión detallada de su entorno y la capacidad de utilizar las plantas de manera muy diversa.

En aquellos ambientes, el  cuidado necesario en la selección e ingestión de plantas para excluir compuestos secundarios nocivos era esencial para la supervivencia y requería de métodos de transferencia de conocimiento; que,  -podríamos especular- habrían transmitido al Homo sapiens con el que convivieron por varios milenios.

Fuentes:

Hardy, K. et al. 2012. Neanderthal medics? Evidence for food, cooking, and medicinal plants entrapped in dental calculus. Naturwissenschaften, Original Paper, 10 pp. DOI 10.1007/s00114-012-0942-0

Shipley, G.P. and Kindscher, K. 2016. Evidence for the Paleoethnobotany of the Neanderthal: A Review of the Literature.  Scientifica Volume 2016, Article ID 8927654, 12 pages  http://dx.doi.org/10.1155/2016/8927654

bottom of page