
De
Huertas
y Jardines
Del jardín a la cárcel
La palinología, que es el estudio de las esporas, el polen y otras micro estructuras de plantas modernas y fósiles, es una ciencia directamente vinculada con las especies de nuestros jardines.
La palinología forense, en particular, es la aplicación de estos estudios en la resolución de cuestiones legales, ya sean civiles o penales.
No es una ciencia nueva; como herramienta forense, ha sido utilizada desde al menos la década de 1950 y probablemente mucho antes, pero sin documentación ni publicidad.
Se usa el término polen, para incluir tanto polen como esporas; que se pueden obtener de una gran variedad de items, incluidos los cuerpos de víctimas y de asesinos.
El polen contiene las células sexuales masculinas de las coníferas y de flores superiores, mientras que las esporas son los propágulos de las plantas inferiores como algas, helechos, hongos, musgos, hepáticas y líquenes.
La utilidad del polen como herramienta forense se debe a su pequeño tamaño, su resistencia a la degradación mecánica, biológica y química, su abundancia en el medio ambiente y su morfología, lo que permite la identificación segura de plantas específicas.
Proporcionan pistas valiosísimas sobre el origen de los elementos y las características de los entornos de los que se obtiene el material.
Algunos de los tipos más útiles de polen para la medicina forense son los transportados por el viento. Debido a que es un método de dispersión poco confiable, estas plantas deben producir grandes cantidades de polen, que generalmente son livianos y están diseñados aerodinámicamente para viajar en las corrientes de aire. Por ej, una planta mediana de Rumex produce aproximadamente 400 millones de granos de polen, una única panícula de sorgo dispersa alrededor de 100 millones y una rama de Pinuscontorta genera más de 600.000 granos.
Algunas plantas con flores viven completamente sumergidas, liberan su polen bajo el agua y luego dependen de que pueda flotar o sea conducido por la corriente para lograr la fertilización, método de transporte también ineficiente que requiere de muchos granos para asegurar la polinización. Este tipo de polen se puede encontrar en la ropa, en los pulmones, en el estómago de las personas que murieron ahogadas, o en un objeto arrojado a un lago o arroyo; sin embargo, a menudo tiene poco valor para el trabajo forense porque se descompone fácilmente y es difícil de recuperar a través de procedimientos normales de extracción.
La mayoría de las plantas con flores son polinizadas por insectos o animales. Dependen del transporte de granos de polen por abejas, escarabajos, polillas, hormigas, colibríes, lagartijas, murciélagos. A menudo tienen una superficie cubierta con ceras pegajosas o producen fibras finas para adherirse fácilmente a los cuerpos de los polinizadores. Tienen una pared exterior fuerte y gruesa que los protege de la abrasión durante el transporte y de los rápidos cambios en la humedad. Debido a la eficiencia de la polinización por animales, la productividad del polen por antera y flor es mucho menor que en las plantas polinizadas por el viento. En los arces, por ejemplo, cada antera a menudo contiene no más de 1000 granos de polen, y en las flores de lilium, cada antera puede contener tan solo 100 granos de polen. A pesar de esta baja producción, este tipo de polen provee las evidencias más útiles.
Una persona puede fácilmente recoger el polen de la escena del crimen, ya sea en sus zapatos o en su ropa. Por eso, un uso primario de la palinología en una investigación forense es establecer un vínculo entre dos lugares, objetos o personas. Debido a que el polen es tan resistente, puede encontrarse adherido a un objeto incluso después de que haya sido lavado. Esporas y polen tienen más importancia que muchas otras fuentes biológicas de evidencia forense. Al ser tan pequeños, entre 7 y 200 micrones, no pueden ser detectados a simple vista, por lo que se convierten en testigos inadvertidos por los delincuentes.
No sólo se usa el polen moderno, sino que en varios casos, la presencia de polen fósil en asociación con una acción criminal también ha sido útil para determinar qué sucedió y dónde ocurrió.
El palinólogo forense debe ser un botánico competente y tener acceso directo y fácil a colecciones de referencia que cubran taxones de plantas nativas y exóticas. Lamentablemente, el desarrollo de las bases de datos de polen y esporas de Internet todavía es insuficiente para la mayoría de los trabajos forenses.
Sin embargo, aunque se amplíen, la culpabilidad o inocencia de un sospechoso o la posible asociación de algún objeto con la escena de un crimen siempre estará ligada a las habilidades de identificación del científico que examina el polen.
La palinología forense siempre será necesaria, incluso si los desarrollos en el estudio de ADN eventualmente permiten que las plantas sean involucradas en una acción criminal.
Fuentes:
Kumari M et al. 2017. Role of Forensic Palynology in Crime Investigation. IJournals: International Journal of Social Relevance & Concern, Vol 5 (3), 13 pp ISSN-2347-9698
Mildenhall DC, Wiltshire PEJ & Bryant VM. 2006. Forensic palynology: Why do it and how it works. Forensic Science International, Vol 163(3): 163-172, ISSN 0379-0738, https://doi.org/10.1016/j.forsciint.2006.07.012.